William Jimenez Lemus
En nuestra nota anterior, "Ingresos y Egresos", haciamos mención al despilfarro del dinero y a la poca itencionalidad de ahorrar y en este tema mencionaré la problematica de las compras y gastos desmedidos producto de la emocionalidad con que manejamos el dinero y que en principio nos hace ver como poderosos.
Las compras desmedidas e innecesarias que en principio nos da la vanagloria de poder, posteriormente se convierten en los grandes dolores de cabeza de la mayoria de las personas que no somos capaces de manejar adecuadamene esta emoción: consumismo.
Hay quienes aun no han recibido el dinero que les corresponde de su trabajo cuando este ya está predestinado a un gastos superfluo e innecesario y si aun no se tiene alguna prevision, el solo hecho de que nos sobren unos pesos, entonces hay que buscarle como nos los gastamos, nos encanta estar "colgados" y sufriendo hasta el proximo pago. Que desagradable es abrir la billetera y verla vacia.
Para los que además de los ingresos salariales, cuentan también con "el respaldo" de una o varias tarjetas de crédito, estas contribuirán a la perdición de nuestras finanzas personales.
Nos dejamos embaucar por la "solemnidad" que se le quiere dar a cada festejo, tales como el dia de la madre, del padre, del hijo, de los amigos, de los enamorados, etc., para inducirnos al consumismo y lo peor del caso es que caemos en la trampa, mientras que nuestra economía personal sigue cayendo en picada degradante.
Ofertas, descuentos, el "llevatelo ahora y paga después", etc., nos inducen a adquirir cosas que no necesitamos o que de momento no son estrictamente necesarios.
Si no contamos con un plan estructurado de ingresos y gastos que nos ayuden a poner los pies sobre la tierra y a entender nuestra realidad financiera, será fácil caer en las trampas del consumismo llevando nuetras finanzas cada dia a mayores dificultades.
No todo en la vida puede ser trabajo y sacrificios, el hombre y la mujer necesitan momentos de esparcimiento, de relax, de cambio, que nos lleve a salir de la rutina y el estrés, pero esto debemos manejarlo de manera concienzuda y bien pensada. Unas vacaciones de 4 dias y 5 noches en una isla paradisiaca es fenomenal para cualquier ser humano sometido al estrés del trabajo y de la vida cotidiana, pero un descanso mal planeado te puede conducir después de estos 5 dias y cuatro noches de placer a más de un año de sufrimiento para poder cumplir con las cuotas del crédito que tuviste que adquirir para darte este "gusto".
Gastemos en lo necesario y ojala bajo el indice de un presupuesto. Recordemos que hay formas de generar mayores ingresos y que debemos ponernos a pensar cual se adaptaría a nuestras capacidades de tiempo y conocimiento.